El ciclo de frescos del ábside está íntegramente dedicado a la Virgen María, y fue creado por Massimo Stanzione en muy poco tiempo entre 1639 y 1640, para permitir a los jesuitas celebrar el centenario de su fundación de la mejor manera posible. Los frescos de las dos medias lunetas de la pared del fondo, que comienzan la historia de la vida de María, son, a la izquierda, Ana y Joaquín expulsados del templo y, a la derecha, Joaquín recibe el anuncio del nacimiento de María en un sueño. . La narración continúa con los ocho paneles más pequeños de la bóveda: la Natividad de María , la Presentación de María en el Templo , las Bodas de la Virgen , la Anunciación,la Visitación, el Sueño de José, el Dormitio Virginis y el Funeral de la Virgen. Finalmente, los dos grandes frescos del centro de la bóveda representan la Asunción y la Coronación de la Virgen.
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